Catalina Valencia
Foto: SCRD

La cultura y el arte construyen puentes para pensarnos en conexión con el mundo

Cuando dos sociedades se encuentran deben ser capaces de encontrar territorios comunes de expresión, vencer barreras de historia y de lenguaje para poder comprenderse, y construir juntas las dinámicas que les permitirán conocerse desde la diferencia para aprovechar la diversidad como una potencia de creación. Ese encuentro entre sociedades, que pueden ser ciudades, países, continentes, tiene en el arte y la cultura dos grandes escenarios de diálogo porque los lenguajes artísticos y culturales son transversales a la vida, porque pueden ampliar la comprensión mutua, porque pueden permitir el reconocimiento en el otro.

Bogotá es una ciudad global, no simplemente por su carácter capital, y por su vocación como centro de negocios donde se dan cita representantes de todo el mundo, sino y sobre todo porque consigue activar desde la cultura puentes que contribuyen a pensarnos como parte nuclear de una red: una red de ciudades creativas, una red de ciudades musicales, una red de cultura que se extiende a todo lo ancho de Latinoamérica y a todo lo largo del planeta. La cultura y el arte de Bogotá son escenarios de diálogos globales, y nuestras iniciativas, nuestros modelos de gestión, nuestras innovaciones en términos de relación entre lo público y la ciudadanía son referente para otras ciudades que se piensan, también, como ciudades para la creación y el cuidado.

Estuvimos hace poco en México, donde contamos nuestras experiencias con el Portafolio Distrital de Estímulos, con Es Cultura Local como modelo de gestión territorial del patrimonio y la cultura, con todo lo que hay detrás de los 15 Distritos Creativos y lo que permiten en términos de activación económica y social del territorio. Hablamos de los enfoques diferenciales aplicados a las convocatorias culturales y al acceso a las ofertas, para garantizar así los derechos culturales de toda la población. Hablamos de las estrategias que adelantamos en pro de una cultura transformadora para la paz, de los procesos territoriales que conectan a las comunidades con el mundo, de las conversaciones que la cultura lidera tanto a nivel económico como social.

Una vez más, en esta ocasión bajo el cielo mexicano, comprobamos que Bogotá es un referente. Que hemos aprendido y desarrollado maneras de conectar a la ciudadanía en el ejercicio pleno de sus derechos culturales, que hemos innovado en la asignación participativa de los recursos para la cultura, que hemos sido vanguardia al soñarnos proyectos de ciudad que conectan con el mundo.

Como parte de la Red Ibercultura Viva de Ciudades y Gobiernos Locales, y como parte de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas, Bogotá seguirá encontrando maneras de poner a la ciudadanía en el centro de la labor cultural, para forjar cada día una ciudad que cuida y crea desde el centro de su vocación.

Ser parte de esa cultura global también es una faceta de nuestro legado. Sigamos creando para conectar, para inspirar, para transformar nuestra ciudad, y el mundo.

Feliz semana.

Catalina Valencia Tobón

Secretaria de Cultura, Recreación y Deporte

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